jueves, 8 de julio de 2010

Adolescencia; Capítulo 1

Capítulo 1: La Despedida

Estos dos meses de vacaciones habían transcurrido con normalidad, pero habían sido los más largos de mi vida. No dejara de pensar en él ni un segundo de mi corta vida. Hablábamos todos los días pero, pese a eso, yo lo echaba de menos y, esperaba que él a mí también, al igual que al resto de mis compañeros y amigos. Me lo había pasado muy bien en casa de mis tíos, con mis primos, a los cuales conocí por primera vez este verano y les tenía gran aprecio. Mis padres se habían ido a celebrar el aniversario de su boda y se habían tomado eses meses sabáticos.

La casa de mis primos era bastante amplia. Contaba con tres baños y cinco habitaciones amuebladas en el piso de arriba, tres de mis primos, una de mis tíos y la de invitados. En el piso de abajo se encontraba un enorme salón, un comedor para unas 10 personas y la cocina. Después estaba una gran piscina climatizada, un jacuzzi para 5 personas, un gimnasio, el sótano, el trastero y el garaje (con tres coches).

Pero eso no conseguía apartar de mi, esos deseos de volver a casa, al instituto, volver con mis compañeros…Todo eso no era para mí, el mundo de los ricos a mi no me iba, y mucho menos el de unos pijos como mis tíos.

En unos minutos, mi padre vendría a recogerme a “Pijolandia”, para volver a casa. Y estaba feliz de volver a casa pero triste por dejar a los pijos de mis primos. Sólo me quedaba recoger un par de shorts y camisetas en la maleta, ponerme las gafas de sol y ya estaría lista para partir. Desde la ventana de mi habitación se escuchó la bocina del coche de mi padre, era puntual, como siempre.

Mi primo, Pablo, de 9 años, era el mediano de la familia. Su cabello era negro y los ojos del mismo color, su piel era pálida y tenía coloretes.Llevaba gafas Siempre llevaba pantalones pitillos, a juego con las camisetas con dibujos que llevara ese día.

-Bueno…Mireia, te vamos a echar de menos-se despidió Pablo, abrazándome.

Le devolví el abrazo y con una sonrisa les dije que les quería y que podían venir a mi casa cuando les apeteciera.

Lucía, de 7 años, era la pequeña de la familia. Tenía el cabello rubio y los ojos castaños, su piel era pálida, como la de su hermano, Miguel. Siempre llevaba puestos vestidos de diferentes colores a juego con los zapatos y las diademas.

Me agaché para quedar a la altura de mi prima, le besé en la mejilla:

-No quiero que te vayas, te voy a echar mucho de menos, ¿por qué no me voy contigo?-me susurró al oído con lágrimas en los ojos.

-No puedes, yo voy a empezar las clases en dos semanas y no iba a poder estar contigo todo lo que me gustaría. Además tu aquí estás bien, con tus hermanos que te quieren muchísimo y tu a ellos-le respondí con una sonrisa y secando las lágrimas de sus mejillas.

 
El próximo día otro capi, espero que os guste!! :) comentad!

4 comentarios:

  1. ola!! lo lei, esta muy bien redactado! jo, ya me gustaria a mi hacer noves como las tuyas :)

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  2. Qe ganas d leer el siguiente...

    Iria Ja Ja

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  3. Ay...Saray, las tuyas son mejor!!

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  4. superironmaden@10 julio, 2010 22:14

    me empieza a gustar la historia vere el otro capitulo

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